Hola meloñ,
Esta vez te escribo para compartir contigo una experiencia.
Tu sabes que yo soy muy hippie… o bueno, para ser más exactos, soy muy esotérica y creo en todo lo que es energías, personalidades asociadas a días de nacimiento… y en sueños también.
Bueno…  Esta experiencia tiene que ver con un sueño que tuve anoche.
Posiblemente tenga que ver con que ayer fue mi 2da presentación de Danza Árabe y por supuesto, volví a verla.  Tenía tiempo sin hacerlo y felizmente esta vez no sentí ese revolcón de estómago que sentí las veces anteriores cuando me la encontraba por casualidad o porque por enésima vez coincidíamos en algún evento. De una “amistad” tan larga, no todo se puede cortar y aún tenemos amigos y actividades que nos fascinan en común.
En esta oportunidad solo la vi y dije “ah… sigue en la academia”. No la perseguí con la mirada ni me puse paranoica a pensar que el que estaba en el auditórium iba a deleitarse. No me hice historias. En fin, nada pasó. Solo pasó por mi cabeza una vez más lo triste que se sintió (y se siente) una traición de esa magnitud.

Últimamente, meloñ, he vuelto a sorprenderme de mi misma. En aquella oportunidad, me pareció increíble que yo, después de tanto repetirme que si me traicionaba quien yo amaba jamás perdonaría algo semejante y sería la despedida definitiva, lo hiciera. Supuse que tenía que ver con las circunstancias, con que yo tampoco fui la mejor persona… llegué a pensar que lo había provocado yo, pero según mi propia experiencia, nada lo justifica.
Ahora mi sorpresa es encontrarme pensando que podría hablarle a ella y perdonarla. La verdad la palabra suena GRANDÍSIMA en mi boca… me siento estúpida diciéndola. Siento que mi ego se ve desde afuera demasiado EGO y sinceramente no es lo que quiero expresar. No sé si me entiendes… El dolor que yo sufrí (Y creo que aún sufro) no fue normal y la tristeza mezclada con rencor, combinado con el golpe bajo en el autoestima, no fueron “juego de carrito”, así que el hecho de pensar en volver a hablarle y darle la oportunidad de decir algo y luego expresarle “no te guardo rencor, la verdad te recuerdo con cariño a pesar del mal final que le diste a nuestra amistad” es algo que me ha puesto auto analítica. En fin… Estoy alargando el cuento.

Por supuesto anoche caí como un tronco en la cama luego del baile y tuve muchos sueños, pero este fue el que me hizo despertar sumergida en mucha sorpresa y preguntas sobre si habrá sido un sueño en conexión:
El sueño se desarrolla en una especie de habitación amarilla con naranja, Camilo (creo) estaba allí. Ella también, con un traje árabe distinto al que llevaba ayer, más tradicional. Yo tenía mi traje de danza árabe verde. Entré en la habitación y la enfrenté. Creo que ella estaba molesta, porque después de lo sucedido, sin querer pero queriendo he hecho que algunas personas se enteren de lo ocurrido. Sin embargo la agarré y la tiré en la cama que estaba allí y la acorralé, le pregunté quién le había enseñado esa nueva actitud (estaba hablando como una carajita gafa, parecía Billy el de Billy y Mandy, y era insoportable, además de estar usando muchas ironías) y que por favor lo cortara que la cosa era seria. Entre muchas cosas que le dije, le hice saber que lo más doloroso para mi había sido ella, que la tristeza más grande la había sentido por ella. Que de un hombre una se espera esas cosas y que como ella sabía, yo estaba clara en que él podría hacerlo en cualquier momento (claro que no me imaginé que fuese justo cuando decidimos recuperarnos) pero que nunca imaginé que la que definía yo como mi mejor amiga, casi mi hermana, fuese a hacer tal cochinada. “Quiero que sepas eso”, le dije. Creo que yo estaba llorando y no sé si ella también, pero puedo decirte que, después de haberle dicho todo lo que necesitaba, sentí una paz… y la sentí tanto dentro del sueño, como fuera de él. Sentí un descanso…! No la acorralé más y me fui. La vi verme mientras me iba.

Desperté meloñ queriendo que ese sueño hubiera sido una experiencia compartida, que ella de verdad haya estado allí y haya escuchado. Para mí eso es totalmente posible! Y sigo queriendo que haya sido así.
¿Haber soñado con eso y el hecho de sentir poder disculparla, me hace ser una estúpida? ¿Seguir sintiendo tristeza por lo que pasó, sentir tristeza por haber perdido a una de mis grandes amigas de una manera tan atormentante me hace tarada? No lo sé… posiblemente si, pero creo que no me importa mucho. 

Creo que Dios está conmigo. 

Copyright 2010 Monólogos Multipolares
Lunax Free Premium Blogger™ template by Introblogger